domingo, 30 de julio de 2006

BBQ & Bowling

Como empieza a refrescar el tiempo, Mendi decidió organizar una barbacoa en su casa. Así que allí nos fuimos, a nutrirnos como animales para dar cuenta de todo. Obviamente, sobró comida, pero esa es la regla de oro de las barbacoas.

Estaban Nacho y Mamen, que pasaron antes de empezar las vacaciones (malditos...). Mamen ya está terriblemente morena, así que como siga tomando el sol van a acabar pidiéndola el pasaporte. Ya han acabado la reforma del piso, así que en cuanto pongan los electrodomésticos ( y nos enteremos) deberíamos montar una fiesta en su casa. Habrá que pensar alguna forma de robarles las llaves.

También estaba Ruiz, al que sólo dejamos contar dos chistes. La verdad es que sigue igual que siempre. Sería curioso verle ir trajeado a la oficina. Posiblemente llevara un traje especial diseñado para ir a conciertos de AC / DC de forma elegante.

Paloma (más rubia que nunca) estaba grogui, y se ha echado dos horas de fiesta mientras que nosotros jugábamos a la consola. Gus nos ha puesto un juego de bolos que posiblemente pase a los anales de la historia como el peor juego de la xbox jamas realizado. Pepe me ha metido una señora paliza a un juego de boxeo. Luis ha estado jugueteando con la DS, tengo que convencerle de que se pille una.Ibarz nos ha contado anécdotas de curas que les dicen a los novios en las bodas que retocen ( y lo justifica). Mendi ha ejercido de cocinero, así que con el calor ha debido adelgazar dos o tres kilitos. Así yo también me mantengo en forma.

Por la noche, y picados por el juego de la consola, decidimos irnos a los bolos. Ángel se apuntó, y jugó sus dos primeras partidas. En la segunda ya quedó por delante mío, lo cual dice más en mi contra que a su favor.

En la primera iba ganando yo hasta que tuve mi habitual racha de desastres. Pasé de tener la partida cómodamente controlada a quedar tercero y gracias. Eso sí, sigo siendo el que da el mayor espectáculo. Soy el único que tira cada lanzamiento con una mano, al que siempre se le queda un bolo esquinado (o uno en cada esquina) y encima el único que da efecto a algún lanzamiento. Lo primero y lo último no afectan a la victoria final, al menos no a mi favor, pero hacen que me gane el afecto de la grada.

De la segunda, lo mejor es decir que Ángel mejoró mientras yo me hundía miserablemente.

Finalmente acabamos en el Vips. Unos tomando helados y otros cosas más consistentes. Una gran oportunidad para blanquear tickets de comida.

Los tres mosqueteros

El viernes nos quedamos solos frente a la noche Gus, Pepe y yo. Así que empezamos de forma tranquila en el Tascopolis, donde se estaba muy bien al no haber mucha gente y luego nos fuimos para Torre Europa en un buho con un conductor asesino, que casi se llevó por delante un coche.

En Torre Europa volví a tener uno de esos grandes momentos que hace años no tenía: No me dejaron entrar a un sitio por las zapatillas!!! Subrealista que en verano te digan algo por llevar unas playeras. Y más absurdo encima si tenemos en cuenta que dentro del sitio lo único que había era espacio libre. Gracias a eso acabamos en el sitio de al lado, donde había más ambiente, una gran proporción mujeres/hombres y el hermano de Pablo, que es exactamente igual que él solo que más grande. Encima nos regaló tres copas. La verdad es que fuimos unos maleducados, porque deberíamos haber ido y darle las gracias al puerta que nos cerró el paso, porque eso nos llevó a un sitio más animado.

Como gran anécdota, el momento en que Gus decidió que atacaramos a dos mujeres que estaban algo lejos. Agarró su copichuela, miro al frente, llegó hasta donde se encontraban, giró la cabeza y vio que no nos habíamos movido y que nos estábamos partiendo de risa a su costa. Realmente somos mala gente.

domingo, 23 de julio de 2006

Vagando por Madrid

Hoy la noche ha parecido casi una etapa del Tour de Francia: de Sol al mercado de San Miguel, de ahí a Tribunal, luego pulular por Chueca y finalmente retirada desde Cibeles. Alguno quedaba todavía que iba hacia la Botellita.

Hoy lo importante era ver a Pablo, en una de sus visitas relámpago a la capital, y a Puce, que volvía del curso de inglés que le hemos pagado entre todos y que dice no le ha servido para nada. También se agradece ver a Iván, al que hacía meses que no veía. Y se agradece a pesar de que antes de irme se le ha ido la pinza y me ha tirado media botella de agua encima. Creo que todo el alcohol que llevaba encima ha influido en esa acción.

Gabi también ha aparecido por allí. Ahora por lo visto se ha orientado hacia las maduritas, de 38 años en adelante. Parece que quiere probar al menos a una mujer de cada posible grupo que se le ocurra, ya sea provincia, edad, religión...

La noche ha ido bien hasta Chueca. Hemos intentado ir a un bar que tenía buena pinta, pero que tenía una cola considerable para entrar. Nos hemos ido a otro que era un cocedero de patos (diría una sauna, pero en Chueca las saunas son de otro tipo), y con eso se ha fastidiado todo. Algunos se han quedado fuera, otros dentro y en general, salvo los borrachos, la gente ha empezado a amuermarse y retirarse para casa. Además, Juanjo y Piru se han ido al Casino, con lo que básicamente que quisieramos salir quedabamos los borrachos, Yoli y María y yo. Como las mujeres se iban a ir a la Botellita, y ni Iván, ni Puce ni Lara tenían pinta de querer ir, parecía que el grupo se rompía aún más asi que, en Cibeles, me he venido para casa escuchando en el autobús a una pobre señora con pinta de estar media loca preguntando como es una guerra nuclear.

sábado, 22 de julio de 2006

Calor en la ciudad

Como buen viernes, salir del trabajo e ir a la piscina de la Autónoma fue todo uno. Ángel se ofreció para recogerme y llevarme desde Tres Cantos, y pudimos comprobar que si al Tom Tom le dices que te lleve a la UAM intenta llevarte a un sitio extrañísimo que quién sabe que relación tendrá con la universidad.

La piscina de la autónoma estuvo por debajo de lo habitual. Se nota que muchas mozas ya empiezan a irse de vacaciones y prefieren las playas ibicencas al cesped y los 50 metros de la piscina. Hay gente sin criterio.

El plan inicial para la noche era pasarnos por el picadero del capitán de barcos (o casa, como se prefiera llamar). Sin embargo, éste renunció al plan por estar con su ligue. Se llevó a la mozalbeta al Tiki Grill y luego al tiki tiki (¡La vida puede ser maravillosa, Salinas!). Como ese plan no salió, acabamos en mi casa, quemando pizzas en el horno, dando gracias por el aire acondicionado y descubriendo con la NDS que cero por siete son cero (Paino dixit). Algunos parece que estudiaron matemáticas con Fran Perea.

Finalmente nos fuimos a Cats. Luis y yo demostramos como se juega al billar con una partida casi perfecta. Mérito adicional teniendo en cuenta que esa mesa de billar está puesta en un sitio absurdo, porque está pegada a una esquina y hay dos lados desde los que dar a las bolas es una hazaña. La gran jugada de la noche, a pesar de todo, fue de Paino. 6 bolas, 6, metidas una detrás de otra. Para hacerse una idea de como iba la partida hasta el momento, ni metiendo las 6 bolas se pusieron por delante.

Dos comentarios adicionales:
- Si volvemos a salir todos con una camiseta roja, paramos en unos chinos y compramos alguna de otro color, que parecíamos las juventudes socialistas.
- Pepe, la próxima vez que me digas que me vas a recordar sacar la botella de agua del congelador, hazlo. Recuerda que no se puede confiar en mi memoria (como bien has visto cuando te he preguntado una semana después cuando era tu cumpleaños).

domingo, 16 de julio de 2006

In Dublin fair city...

Diría que he pasado tres días en Dublín, pero realmente no ha llegado a 38 horas con Mª Ángeles. Claro, que si se incluye el tiempo perdido en llegar a aeropuertos, esperar, volar y salir hay que incluir 12 horas más. (una hora hasta el aeropuerto, dos desde que facturas hasta que sale el avión, dos volando, media hora saliendo del aeropuerto y 45 minutos hasta que llegas a destino). Confío en que alguien se de cuenta que los aeropuertos están mal pensados y que no tiene sentido tener que llegar dos horas antes de que salga el avión.

Mª Ángeles está bien. Se la nota más suelta con el inglés, aunque, como nadie la corrige, comete los mismos fallos una y otra vez. Encima, si la corriges, se cabrea. Mujeres... Escribidla y convencedla de que tiene que hablar con irlandeses y proponerla formas de hablar con ellos. No, ligarse a uno no es una alternativa.

Dublín en estas fechas esta llena de adolescentes españolas e italianas, que ahora son bastante más golfas que cuando yo estuve allí hace 12 años. Si los padres supieran como es eso, no iría ni uno. Aprenden más las artes amatorias y del cortejo que inglés.

Respecto a las irlandesas, son feas y guarras. Es normal que los irlandeses sean unos alcohólicos, porque para querer liarse con alguna de ellas hay que llevar encima más de 10 pintas.

Y así de primeras nada más. Un beso para todos de su parte y que el quiera que suba a verla. Eso sí, no la hagais caso con el clima. A mi me dijo que me llevara camiseta, camisa y cazadora y hoy estábamos en Stephen Green en camiseta y a la sombra porque ella tenía mucho calor. Exagera claramente para dar pena.

domingo, 9 de julio de 2006

¿ Cómo surge el racismo?

Situación real y vivida esta noche: camino desde el Alpisco hacia Argüelles, bajando por Meléndez Valdés en el cruce con Blasco de Garay. Vamos 5: Pepe y yo por delante y detrás Gárate, Ibarz y Luis. Antes de cruzar Hilarión Eslava, nos cruzamos con un marroquí. Mientras cruzamos, le oímos decir algo, como llamándonos. Por delante, Pepe y yo ni siquiera giramos la cabeza. Los tres de detrás le ignoran igualmente.

Cruzamos también Meléndez Valdés. Nosotros dos vamos unos 10 metros por delante. En ese momento giro la cabeza y veo que el marroquí está a la altura de estos 3, justo después de haber cruzado. Aviso a Pepe para que se pare y nos quedamos parados esperando a que el chaval ese deje de dar la vara. Le está diciendo a Gárate que alguno, al pasar a su altura, le ha empujado y que pidan perdón.

En ese momento, y sin venir a cuento, le suelta un puñetazo en la cara a Gárate. Luis empieza una frase para intentar calmar los ánimos, pero antes de conseguir acabar la segunda palabra se lleva un puñetazo en la boca. Ibarz también se lleva uno. Al ver esto, Pepe y yo nos acercamos. En lo que recorremos los 10 metros, Luis intenta su segunda aproximación pacífica, así que se lleva otro puñetazo que le pilla de refilón, Ibarz también se lleva otro por estar cerca.

Finalmente me quedo yo encarado con él, a unos dos metros. El marroquí da un paso para acercarse para estar a distancia de puñetazo, así que yo doy un paso hacia atrás. En ese momento el tío calibra la situación y, por algún extraño motivo, decide marcharse.

Gárate acabó con un pequeño corte en la mejilla, Luis con un labio bastante hinchado en el lateral e Ibarz bastante mareado (Pepe dijo cómo se llamaba lo que le había pasado, pero mi memoria no da para eso, algo como síndrome vascular). Así que pasamos por el hospital de Madrid de urgencias, para ver si Luis necesitaba puntos en el labio o si alguna herida podía ser peor de lo que parecía, pero no fue nada. Luego fuimos a la comisaria de Santa Engracia para denunciarlo, pero sólo es de DNI y pasaporte, así que la denuncia la pondrán otro día.

En resumen, que un marroquí nos atacó a 5 personas, y golpeó a 3 sin llevarse ni un solo golpe. Se notaba que sabía pelear, porque en vez de golpear solo a uno golpeó a los 3 que le rodeaban para evitar represalias.

Respecto a lo que he comentado del racismo, pues es triste, pero los marroquíes se están ganando su mala fama a pulso. Con la Fuentecilla conocimos a Hassan y sabemos que hay marroquíes honrados y trabajadores, pero cretinos como el de hoy, que encima decía que le habíamos golpeado y que no le pedíamos perdón por que no teníamos educación, son los que hacen que cada vez más gente les tenga un odio casi visceral.

Edito: Rectifico los nombres de las calles, como bien me ha corregido Pepe.

miércoles, 5 de julio de 2006

Gestión del tiempo

El lunes tuve uno de estos cursos que tanto gustan a recursos humanos: gestión del tiempo y trabajo en equipo. La verdad es que fue un curso en el que prácticamente todo lo que se dijo es de sentido común, pero viene bien que te lo recuerden de vez en cuando.

Lo más entretenido de estos cursos son los jueguecillos que se hacen. Mencionaré los tres más destacados:
- Sigue las instrucciones de esta hoja al pie de la letra. Básicamente, la primera pone que no hagas nada hasta haber leído todas las instrucciones y la última dice que ignores todas menos la segunda (que es poner tu nombre). Entre medias hay 24 instrucciones absurdas.
- Por equipos, hacer rectángulos con el papel, doblarlos a la mitad, dibujar una cruz y un círculo y llevarlos al otro extremo de la sala. El mayor número posible en minuto y medio. La gracia principal radica en que al principio dices cuantos piensas hacer y luego descubres que eres un inútil. Curiosamente, Luis me comentó que el había hecho este jueguecillo la semana pasada, así que sabía lo que iba a pasar. En primera ronda mi equipo apostaba por 20, yo recomendé 4 y el resultado final fueron 0. Ni uno sólo válido. En la segunda, yo sugerí 4, pero mi equipo elevó la apuesta a 8. Finalmente fueron 3 válidas. Mejor que el otro equipo, que sólo hizo 2. Hubo bloqueos, placajes... Incluso agregué el de ejemplo a nuestro grupo para hacer más. Bastante gracioso.
- 4 equipos en un juego similar al dilema del prisionero. Básicamente, sin comunicarse entre los equipos, cada uno elige un color rojo o negro. Si todo el mundo elige negro, todos pierden un punto. Si todos eligen rojo, todos ganan un punto. Pero si hay división entre los rojos y los negros, los que eligen rojo pierden puntos. Las fases graciosas son en las que se habla entre los equipos para consensuar una decisión. Las traiciones abundaron.

domingo, 2 de julio de 2006

Fiestas del orgullo ¿Gay?

Aprovechando el dia del orgullo gay, en Chueca se organizan unas fiestas que recuerdan a las tradicionales de los pueblos de toda España. Esto es, escenario con alguna orquesta o DJ, los bares con barra en la calle, y todo el mundo bebiendo en la vía pública. Todo esto con un ambiente impresionante, miles de personas.

Lo curioso del caso es que se ve muy poca población gay. Posiblemente se deba no a que sea un número bajo, sino a que las fiestas se llenan de los que llegamos de fuera del ambiente, y éramos muchísimos. Si ves de vez en cuando alguna parejita dándose el lote, o a un grupo de "osos" haciendo cola para entrar en un local (en el que no creo que entrara ningún hetero sobrio). También puedes ver a dos lesbianas dándose el lote salvajemente (lo mejor de la noche, sin duda).

Tanto el viernes como el sábado acabamos en el mismo sitio, enfrente de un edificio del Ministerio de Cultura. El viernes porque Rafón celebraba su cumpleaños allí y el sábado porque pasamos por Chueca y no cabía un alma, así que seguimos camino. Mejor el viernes que el sábado, que había más gente. Además, Mendi y Gus en una fiesta callejera y en un barrio gay creo que no acaban de estar cómodos, así que sobre la una ya se retiraron hacia Cats (aunque habría que ver en que discoteca acabaron realmente).

Que son cuatro vidas!!!!

Situación: un garaje, cuatro personas en un coche, el dueño del coche de copiloto porque había bebido y no iba a conducir en esas condiciones. El conductor, que nunca había cogido ese coche. Y detrás, dos individuos partiéndose de risa (uno bastante borracho).

El pobre conductor intentando arrancar y sacar el coche de la plaza calandolo una y otra vez. Lo de atrás partiéndose, y el copiloto poniéndose nervioso y poniendo nervioso al conductor, hasta que soltó la frase que encabeza este post.

El resto de los efectos del alcohol de esa noche mejor no lo comento, aunque hay alguno que no se acuerda de casi nada.

Sólo decir que una imitación de Montes diciendo "Salinas!!!!!!", debió hacerse unos cuantos millones de veces.

Remembering..

María le ha preparado a Higuera uno de esos regalos que te traen recuerdos durante todo el tiempo que lo estás viendo y que, incluso, podrían tenerte horas y horas de recuerdo. Básicamente era un álbum de fotos, con cientos de imágenes. Lo original del caso es que en la mayoría no salía siquiera Luis, sino que eran de los amigos. Y claro, pues los amigos cuando nos veíamos en las fotos, aparte de ver lo que vamos envejeciendo, nos vamos acordando de las batallitas asociadas a cada foto.

Gran regalo y gran momento viendo las fotos. Con lo que me cuesta hacer regalos en condiciones y el talento que tienen otras personas para ello.