sábado, 31 de octubre de 2009

Sólo nos queda soñar y esperar y confiar

Maslow tenía razón, pero lo que no dijo es que somos todos imbéciles y egoistas. La piramide de las necesidades debería ser como las egipcias, algo social, no individual. Una sociedad en la que desaparece el trabajo más rápido que los sueños de adolescencia, en la que el paro asola el paisaje, no debería permitir que sus miembros perdieran energías en sueños vacuos, en amores trágicos, en llantos por penas que no aportan nada. La sociedad debería funcionar como una máquina perfecta, sus engranajes, sus miembros, deberían priorizar el bien común sobre el individual.

Y si alguien se cree que he escrito eso, que me lo diga... El error no es de Maslow, que lo es, que lo único que nos demostró es que, con cuantas más necesidades cubiertas tengamos más difícil será ser feliz. El error es nuestro que no nos damos cuenta que podemos soñar sin hacer nada, pero no podemos conseguir que los sueños se cumplan si no arrimamos todos el hombro, si no nos comprometemos.

Absurdas pirámides, absurdo Maslow y absurda felicidad, que sólo vale para recordarnos, día sí, día también, que no la hemos alcanzado.

miércoles, 28 de octubre de 2009

relato: conduciendo

Cerrar la puerta. Abrocharse el cinturón de seguridad. Meter la llave en el contacto, girarla, oir el motor despertar. Quitar el freno de mano, primera, acelerador, segunda, acelerador, tercera, acelerador. Intermitente, incorporación a carretera. Cuarta, acelerador, quinta, acelerador, acelerador. Aire colandose por la ventanilla, desordenando mi pelo, resonando por el interior del coche. Sensación de velocidad, sensación de libertad, sensación de huida. El aire, el sonido del motor, de los coches que van quedando atrás, pequeños en el espejo retrovisor, diminutos segundos después. Un destino al que casi sería mejor no llegar y prolongar el viaje, que a veces es el fin en sí mismo. Como esta vez. Si fuera posible, la carretera se perdería más allá del horizonte, y seguiría, recta, curvilinea, atrayente e hipnotizante tramo tras tramo. Ascendería hacia el cielo y se acabaría detrás de una estrella. Encender las luces, la noche cae. El paisaje queda convertido en un manto negro, con luciérnagas de metal que se siguen unas a otras. Intermitente a la derecha, mi desviación. Cuarta, frenar. Tercera, frenar. Un breve rato por un camino que huele a pueblo, a campo, a orígenes. Huele a todo aquello que se ha perdido. Segunda, intermitente. Girar justo donde la última vez un conejo se asustó por las luces. Freno. Coche parado. Freno de mano. Meter primera. Desabrocharse el cinturón, abrir la puerta del coche. Abandonarlo.
Darse cuenta que el camino se ha acabado. O ha empezado, qué más da.

lunes, 26 de octubre de 2009

De noche

Un grito en un lugar lejano. Un coche acelerando al cambiar el semáforo en el que presumiblemente estaba. Zumbidos de miles de televisores conformando el panal de luces que se veía por las cortinas. Unas risas espaciadas, empapadas en alcohol, juveniles y a la vez, decadentes, vencidas. Un autobús deteniéndose con su contenido humano de deshechos de la noche, unos, abandonando el vehículo, otros, abandonados a su suerte. Sonido de pasos de una pareja que pasea rápido, deseando llegar a algún sitio cuanto antes. Sonido lento y rítmico de una pareja que se detuvo en un portal, y se funden, una y otra vez, contra los telefonillos. Un perro ladra. No es respondido. Pasa veloz, una ambulancia.
Cierro los ojos, duermo, la noche en la ciudad concluye para mi. Fuera, el mundo sigue imparable.

domingo, 25 de octubre de 2009

700

Una mesa llena de papeles, escritos de forma apresurada, con anotaciones, con errores manifiestos. Están desperdigados, sin orden ni concierto. Al lado de la mesa, una papelera. Rebosa. Si se analizara detenidamente, muchos de los textos arrugados ni difieren demasiado de los que quedan en la mesa. Una pequeña carpeta, con borradores, se queda coqueta en una esquina. No hay mucho dentro, pero tiene pinta de haber vivido momentos de más uso.

Hay un archivador lleno de fotografías mediocres y recortes de periódicos. La calidad de las fotos es baja, y la relación entre ellas, compleja. Su ordenación, cronológica, no hace más fácil ojearlas de forma lógica.

Cerca de la carpeta de borradores, hay una pila de agendas, de este año y los dos anteriores. Hay fechas marcadas, algunos textos grapados a días.

Un bolígrafo queda, sobre una hoja en blanco, en el borde más cercano a la silla. A los pies de la mesa hay varios tacos de hojas. Parece que hay previsión de seguir escribiendo mucho. Sólo faltaría descubrir para qué se está escribiendo...

( lo que sería mi blog si en vez de una página de internet estuviera en el MundoReal. Mi pequeño homenaje a él tras haber alcanzado los 700 artículos. Porque revisar lo que ha pasado cada cien artículos es aburrido y hay veces que es mejor no echar la vista atrás, porque se han dejado demasiadas cosas por el camino. )


jueves, 22 de octubre de 2009

Grandes citas anotadas en un día gris

Alice asked the Chesire Cat, who was sitting in a tree, "What road do I take?"
The cat asked, "Where do you want to go?"
"I don't know", Alice answered.
"Then," said the cat, "it really doesn't matter, does it?"

Alice in Wonderland, Lewis Carroll

Y así, en encrucijadas o en rotondas, o en amplias plazas donde no hay un camino a seguir. Buscando un camino, o perdiéndolo. Melancolía a veces. Recuerdos. Recuerdos... Soledad y miedo. La sensación, siempre recurrente, de haber perdido otra batalla sin haber llegado a lucharla.

"In the midst of winter, I finally found that there was in me an invincible summer."

Albert Camus

Y mientras, en algún lugar, descubrí que llegaba tarde al verano y al invierno, a la noche y a la mañana, a cada minuto. Llegaba tarde a lo importante de una vida que se desvanecía.

"When I went to school, they asked me what I wanted to be when I grew up. I wrote down 'happy.' They told me I didn't understand the assignment. I told them they didn't understand life."
Charles Bukowsky?


Y en algún momento me haré mayor, y descubriré el sentido que tenía todo... Podré dormir por las noches con esas sonrisa que ahora añoro.

Besos.

miércoles, 21 de octubre de 2009

relato: De boda 3 ( la verdad es un monstruo polifacético )

Siempre me han aterrado las bodas. La mezcla de un protocolo al que ceñirse mientras te asalta una explosión de sentimientos a flor de piel me ha parecido que convierte un día que debiera ser un tranquilo papeleo legal en un acontecimiento desmesurado y pretencioso. Pero a esta boda tenía que ir. Era la mía. Tendría que subirme a ese altar, recorrer con una falsa sonrisa el pasillo. Ir agradeciendo, a cada paso, que todo el mundo estuviera en ese día que llevaba temiendo tanto tiempo.

Mi vestido, mi peinado, me permitirían brillar, destacar, lucir. Lo odiaba. Las luces, las miradas y los deseos concentrándose en ese vestido de larga cola que tendría que arrastrar como una pesada carga. Vestido en el que desde atrás notaba una mirada conocida. La mirada que siempre había deseado, los ojos en los que siempre había querido bucear. Los párpados que había querido besar. Nunca me atreví, cobarde, resignada a mi suerte. Tantos momentos donde poder haberlo intentado...

Recuerdos. Recuerdos a cada segundo viniendo a mi cabeza. Recuerdos de él en tantos sitios. Recuerdos de su piel, de su pelo, de su ingenio. Recuerdos que quedaban atrás, bajo esa larga cola que condenaba mi vida pasada y me lanzaba por un barranco a una etapa nueva. Recuerdos que me sepultaban junto a mis miedos.

Jamás me había sentido tan sola, tan condenada. Creo que mi rostro sonreía por el propio peso del maquillaje, mientras mi vida, disimuladamente, abandonaba la iglesia por un rincón sombrío.

Miré hacia atrás buscando algo, sin saber el qué. Vi rostros incomprendidos, gente ansiosa por que todo siguiera y acabara, familiares emocionados. Y en un rincón, sus ojos, que se cruzaron con los míos. Dudo que viera la petición que le hice en ese instante de que me sacara de allí. Le dije que le quería como nunca le había dicho a nadie. Pero yo sabía que era tarde, y que él, desgraciadamente, se estaría alegrando de mi boda.

Miré a mi prometido. Empecé a llorar débilmente. Él me dio su pañuelo, me cogió de la mano, y todo siguió su curso esperado.

Hace años, hubo un día en que creí que ibas a decirme que me amabas, que compartiéramos nuestra vida olvidandonos de todo. Pero dijiste una trivialidad, y te fuiste a casa o a otro bar, qué más da. El despecho, el infierno, un gin tonic, un escalón y un zapato herido me lanzaron en brazos de mi futuro marido.

"Sí, quiero"

Me coge de la mano, cojo la suya. Los anillos. Unimos nuestras vidas mientras la mía pierde la capacidad de soñar.

Ya no me quedan ni lágrimas para llorar. Y lo peor es que tú, desde tu rincón, lloras emocionado.

martes, 20 de octubre de 2009

relato: De boda 2 ( todo cambia con tan poco... )

Siempre me han gustado las bodas. La mezcla de un protocolo y una ceremonia religiosa combinada con sentimientos intensos a flor de piel me ha parecido que convierte un mero trámite administrativo en un acontecimiento grandioso. Pero a esta boda no tenía que haber venido. Por ella. No podría verla en ese altar, ni soportaría notarla feliz recorriendo el pasillo. No quería que sus ojos, claros y estrellados, se cruzaran una vez más con los míos en ese día que ella llevaba tanto tiempo deseando y que llevaba atormentandome desde hace meses.

Ella resplandecía, límpida, nivea. Las luces, las miradas y los deseos concentrándose en ese vestido de larga cola que yo apenas podía mirar. Decir que iba hermosa es decir poco. Aunque daba igual lo que hubiera llevado. Su vestido recordaba a un fantasma del pasado, que volvía, que se quedaba allí, que me echaba en cara todo lo que debiera haber pasado y nunca llegó a suceder.

Recuerdos. Recuerdos a cada segundo viniendo a mi cabeza. Recuerdos de ella en tantos sitios. Recuerdos de su voz, de su risa. Recuerdos que quedaban atrás, bajo esa larga cola que cerraba una vida pasada y servía de trampolín a una etapa nueva. Recuerdos que me sepultaban junto a mis miedos.

Ella, siempre tan especial, siempre con ese aura que la rodeaba irradiando felicidad, lista para cambiar su vida. Estaba decidida, feliz, deseosa.

En ese momento echó la vista atrás, quizás despidiendose de su anterior etapa, y nuestros ojos se cruzaron, durante un breve instante. Ella posiblemente no se diera cuenta que era yo. No se diera cuenta del amor incomprendido y cobarde que quedaba en mi mirada.

Justo después, le miró a él, durante un segundo, fijamente, intensamente. Una lágrima apareció en su mejilla. Él la prestó su pañuelo, se cogieron de la mano y siguió la ceremonia.

Hace años, él tuvo un día en que se atrevió y tuvo suerte... Yo tuve cientos de días de silencios, de miradas débiles y fugaces, de proposiciones disimuladas. Fuimos amigos que se quisieron mucho, destinos que nunca llegaron a enhebrarse.

"Sí, quiero"

Sus manos juntas, los anillos. Dos vidas que se unieron. Un sueño que se rompió.

Ahora la lágrima cae por mi mejilla...

lunes, 19 de octubre de 2009

relato: de boda

Nunca he sido alguien a quien le haya gustado ir de boda. La mezcla de un rígido protocolo y una estricta ceremonia combinada con sentimientos intensos a flor de piel nunca me ha resultado compatible. Pero a esta boda tenía que venir. Por ella. Por verla en ese altar, por verla feliz recorriendo el pasillo. Por ver sus ojos, claros y estrellados, cruzarse una vez más con los míos en ese día que ella llevaba tanto tiempo deseando y que había sido destacado hacía meses en mi calendario.

Ella resplandecía, límpida, nivea. Las luces, las miradas y los deseos concentrándose en ese vestido de larga cola que yo apenas podía ver. Decir que iba hermosa es decir poco. Aunque daba igual lo que hubiera llevado. Su vestido, para mi, era etéreo, fugaz, una bruma tenue que rodeaba ese rostro en que mis ojos se clavaban cada poco tiempo.

Recuerdos. Recuerdos a cada segundo viniendo a mi cabeza. Recuerdos de ella en tantos sitios. Recuerdos de su voz, de su risa. Recuerdos que quedaban atrás, bajo esa larga cola que cerraba una vida pasada y servía de trampolín a una etapa nueva.

Ella, siempre tan especial, siempre con ese aura que la rodeaba irradiando felicidad, lista para cambiar su vida. Estaba decidida, feliz, deseosa.

En ese momento me miró, y recordé de nuevo lo que era sonreir simplemente con los ojos. Se que ella, en los míos, notó que mi amor por ella seguía ahí, que nunca iba a cesar. Fue solo un segundo, dos como mucho. Pero nos dijimos tanto en ese breve lapso!

Una lágrima apareció en su mejilla. La alcancé el pañuelo. Nos cogimos de la mano y seguimos con la ceremonia. Hace años hubo un día en que tuve suerte... Hace años tuve un día donde la felicidad, el cielo, sus ojos, los míos, el deseo y un suspiro se cruzaron en una estrecha escalera.

"Sí, quiero"

Su mano, mi mano y los anillos. Dos vidas que se unen. Un sueño que se cumple.

Ahora la lágrima cae por mi mejilla...

domingo, 18 de octubre de 2009

Lágrimas que brillan

Lista de experiencias que añadir a la vida:
- Ir a una boda en el colegio.
- Ir de testigo a una boda.
- Llevar chaqué.
- Hacer llorar a la novia en la ceremonia ( y dejar nudos en varias gargantas, por lo visto ).

Por primera vez en mi vida, posiblemente por última, me pidieron que escribiera algo personal para leer en una boda. Una boda de dos personas a las que quiero con locura y a las que les debo mucho. Negarme era imposible. Era un privilegio.

Así que escribí un texto, uno de los que más he tardado en mi vida. Recortar aquí, mover, borrar, borrar, escribir... Tirarlo todo y empezar de nuevo. Al final, quedé contento. Era algo personal para los novios, pero podría haber sido cualquiera el escritor. No era mi día, tenía que ser el suyo.

Así que, durante la homilía, me dejaron a un metro de ellos: ellos dos y los padrinos a un lado de el altar, yo al otro. Era, ciertamente, como estar solo con ellos. El resto de la iglesia desapareció, sólo quedamos los cinco.

Y en la primera frase, la novia, ya tenía una lágrima asomando. Miedo me daba seguir, quedando folio y medio. Él tuvo que dejarla el pañuelo más de una vez. Yo tuve algún momento en que temí ponerme a llorar también. Pero no fue mal, esperaba haber estado mucho más nervioso. Pero no puedes estar nervioso hablando en petit comite con dos amigos.

Alguno me pidió que publicara el texto aquí. El texto realmente es de los novios, así que ponerlo aquí se sale de mi jurisdicción. Sí puedo enviarselo a alguien por correo si lo quiere. Y he prometido traducirlo al inglés a petición de alguno de los amigos de los novios venidos de tierra extraña.

Prometo que no contaba con que fuera tan emotivo y que dejara a tanta gente a punto de llorar... No era el objetivo... ¿ O sí ?

Felicidades a los novios de nuevo!

jueves, 15 de octubre de 2009

Venecia fotografiada


Va a parecer que ha sido intencionado, pero en todas las fotos hay agua. No ha sido intencionado, pero la verdad es que, en Venecia, conseguir fotos sin agua es un ángulo complicado o dentro de una iglesia. Alguna tengo, que conste. Pero puestos a hacer selección, me quedo con estas de aquí abajo. Alguna más en facebook, bastantes más en mi casita...

Empiezo con una vista nocturna desde el puente Rialto. Todo lo que se ve en ambas riveras son restaurantes. Y el movimiento de barcos no cesó en los quince minutos que estuve tirando fotos.

Desde el Campanile sacando la foto a las góndolas que esperan a los turistas que salgan de San Marcos, a los pies de las estatuas que suponen los símbolos de Venecia. Entre ellas se ejecutaba antes a los reos de muerte. Los supersticiosos como que no pasan por debajo.


Si no me equivoco, que no sería raro, Santa María dei Miracoli. El cielo presagiaba lluvia, pero después de asustarnos, se portó bien. Una de las múltiples iglesias que hay que ver. Y, si recuerdo correctamente, una de las pocas que permite sacar fotos en su interior.

En Venecia, recomiendan visitar Murano ( y comprar allí, que el cristal bueno es muy caro ). Relativamente cerca está Burano, una isla con su pueblecito de antiguos pescadores, y sus casas pintadas de vivos colores. Nadie menciona la torre de su iglesia, pero hay que ver el ángulo que tiene. Meritorio que aún no esté en el suelo.


El atardecer volviendo a Venecia... Poco que añadir.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Venezia

Venecia es uno de los destinos preferidos por las agencias de viajes. Medio planeta lo tiene marcado como destino turístico, lugar con encanto, destino romántico. Y hay que reconocer que ellos lo potencian y subsisten gracias a ello. No se que sería de toda la ciudad antigua de Venecia sin el turismo, no quedaría nada.

Primero, y siendo honrado, debo decir que Venecia me ha sorprendido. Esperaba un lugar pestilente y con muy poco que ver, y no ha sido así. No lo esperaba en absoluto como ha sido. Mejor, siempre prefiero que me sorprendan.

Venecia destaca en varias facetas: es un laberinto, difícil ir de un sitio a otro si no vas mirando un mapa o si el destino no es uno de los sitios importantes. No hay coches. Ninguno. El tráfico, el transporte de mercancías, se hace con embarcaciones ( de varios tipos ). Es chocante el no ver coches en ninguna esquina, que no haya semáforos. El hecho de que haya canales supone que hay puentes. Uno acaba harto de tanto subir y bajar puentes.

Lo dijo el recepcionista de nuestro hotel, y no iba desencaminado: Venecia es un museo en sí misma. Ya solo por sus calles, por su urbanismo, merece la pena verla. Si además a eso se le suma las joyas que tiene por iglesias, algunas maravillosas, hay pocas excusas para perderse por las callejuelas y patearse la ciudad.

San Marco es un clásico visto en mil postales, fotos y películas. Una bella plaza ( curiosa su no simetría ), con la torre del reloj, el campanile y la basílica. La basílica no es excesivamente grande, pero los mosaicos que la decoran, aparte de inesperados, son de gran belleza. Impresindible pagar la visita a la parte superior que, además de ver las esculturas ecuestres, permite ver los mosaicos desde mucho más cerca.

No puedo no mencionar lo que más nos maravilló: la Scuola Grande di San Rocco ( seguro que está mal escrito ). Son sólo tres salas, pero con unos Tintorettos espectaculares.

El puente de los suspiros, mejor no lo enseño, que estaba casi por entero cubierto por publicidad de Geox, que debe haberse gastado una pasta en su conservación.

Los dos primeros días los dedicamos a ver iglesias, museos, San Marcos, a perdernos un poco por las calles. Todo a pie. Nuestro hotel, en el mismo centro, facilitaba las cosas.

El tercero y último, ya si que subimos a los vaporettos. Gran Canal en un sentido hasta el Lido, volver por el lateral norte de la isla, ir a Murano, Burano y Torcello ( como curiosidad está bien pasarse por las tres islas, pero Torcello es la más flojita ) y volver al atardecer, viendo la puesta de sol. Alguna foto maja quedó de este último tramo.

Eso sí, todo muy orientado a los turistas. Era difícil salirse de la zona turística e, incluso fuera, seguías con la sensación de que todo estaba pensado para los de fuera. ¿ Cómo vivirán los venecianos ?

Mañana pongo fotillos...

Besos desde Madrid, sobre todo, a ti, claro, ¿ a quién si no ?

martes, 13 de octubre de 2009

Florencia

Ya que acabé con Florencia por aquí y antes de hablar de Venecia, aprovecho y subo unas fotillos. La mayoría están en facebook, si alguno quiere más, que las pida, que, a fin de cuentas, son fotos de piedras y maderas.

La plaza de la Signoria, de noche, de lo poquito que estaba iluminado. Apoyado en una papelera con un trípode de los mínimos. Meritorio que no esté movida ( varias fotos movidas borradas antes de esta, claro ).

En la misma plaza, y de día, el David. Bueno, para que mentir, la réplica. El David está en la Academia, donde te cobran una pasta por entrar. Para que negarlo, en la Academia, bien iluminado, aislado, después de haber pagado por verlo, parece mucho más impresionante.


Santa Maria Novella. Al lado del hotel ( pedazo hotel en el que estuvimos, la verdad, cuando me pongo en plan cutre, un crack, pero cuando me pongo en plan chulo, un señor! ). Sí, esos dos tipos me machacaron la foto, pero, a mi pesar, es la mejor de la iglesia.



Y finalmente, la Catedral. Espectacular arquitectónicamente. Despoblada por dentro.


Por desgracia, en muchos sitios dentro no se podían hacer fotos, porque la capilla de los Medici era increible, a pesar de los andamios.

Dejo esto como aperitivo, mañana, empiezo con Venecia!

viernes, 9 de octubre de 2009

Florencia, arriverdechi

Vale, me he vuelto a conectar, pero porque no sabia a que hora
volábamos de vuelta. Y si, el martes madrugamos...

Ayer, empezamos la mañana en el Palacio Pitti. Espectacular el palacio
y una gran colección de cuadros. No teníamos tiempo para ver los
jardines, que además eran una pasta adicional: hay q elegir, ladrones.
De allí, y atravesando el puente Vecchio, nos fuimos a los Uffici.
Algunos cuadros hiper conocidos, como el nacimiento de Venus. Se me
quedo algo pequeño, lo esperaba mas grande. También vimos la piazza de
la Signoria, donde, entre el millar de personas, destaca la copia del
David.
Después de comer, en el propio museo, un timo, nos volvimos al otro
lado del rio: piazza michelangelo y San Miniato. El paseo es duro,
pero vale la pena. Las vistas son espectaculares, San Miniato y su
cementerio merecen el paseo. Luego, el tiempo se nos vino encima.
Malditos horarios europeos. Ya de noche, vimos la escasa iluminación.
Pondré fotos si no están muy movidas. Lastima de no tener un trípode
bueno...

Hoy hemos completado, y con buenas visitas: palacio Vecchio, Santa
Croce ( lastima de obras ), Bargello ( demasiadas cosas pequeñas,
saturaba ), Santa Maria Novella, la capilla de los Medicci (
ESPECTACULAR ), el palacio Medicci Ricardi... Y dos o tres cosillas
mas, de relleno. Incluyendo un paseo por el mercado de San Lorenzo.

Mañana, a Venecia, donde esperemos que no llueva. Ahora mismo hay una
tormenta aquí que tela... Para que te pille en un barco...

Besos a todos, sobre todo a ti... Ahora si que me temo q hasta la vuelta...

miércoles, 7 de octubre de 2009

Florencia

Por necesidades del guión, he tenido que comprar horas de Internet en
el hotel. Así que hoy si, pero dudo que el resto de los días invierta
en esto.

Básicamente, ayer descubrí, una vez mas, que soy torpe. Nos faltaba
una noche de hotel por contratar. He tenido que conectarme a Internet
a ver si podía hacerlo electrónicamente y, al ver que no, he recurrido
a skype para hacerme entender en perfecto italiano. Italiano a la
madrileña, vamos.

Ayer llegamos a dormir a Venecia, precioso tercer piso sin ascensor.
Los mosquitos, cabrones, solo fueron a por mi.
Esta mañana, tren a Florencia y hala, a empezar el turismo.
Primera parada: la academia para ver el David. Genial. Que pasada. Es
increíble ver el nivel de detalle, y es mármol... Como curiosidad, las
estatuas inacabadas que hay te hacen ver lo compleja q es la
escultura.
De ahí, a San Lorenzo. Muy modesta por fuera, con tesoros por dentro.
Luego, la catedral, incluyendo el baptisterio y la cúpula. El
baptisterio es una maravilla, la catedral por fuera es desbordante y
la cúpula, aparte de 463 escalones, concede una visión de Florencia y
del fresco de la cúpula que hacen que el castigo físico valga la pena.
Mañana los Uffici, el palacio Pitti, puente Vechio y San Miniato.
Pasado, lo que falte, parece que bajo la lluvia... :(

Besos a todos, sobre todo a ti...

LA CIENCIA EN ESPAÑA NO NECESITA TIJERAS...



Los que recorrais hoy la blogsfera española espero que encontreis en muchos sitios esta imagen y un artículo con el mismo título que este: la idea surgió de la aldea irreductible, uno de los mejores blogs españoles, y tenía pinta de ir a tener gran repercusión. Me sumé a la campaña, así que cumplo con la parte que me corresponde. Los que podais difundirlo, hacedlo, a ver si conseguimos algo de ruido y los que toman las decisiones presupuestarias cambian algunas partidas de sitio. Ya que nos suben los impuestos, que al menos el dinero vaya a un sitio útil.

¿ Por qué la ciencia en España no necesita tijeras ? Porque hay que cambiar el modelo productivo de este país, y porque la base de una economía moderna tiene que partir de la I+D+i. La investigación, el desarrollo y la innovación tienen que ser el punto de partida de las empresas españolas, y tienen que ser también una pieza clave en nuestras universidades. Sin esas tres siglas básicas, nos mantendremos como una economía dependiente del exterior, pionera en ningún campo, y confiando en los milagros y el talento individual, pero no el fruto de un trabajo colectivo bien organizado.

No podemos seguir dependiendo de ladrillos y turismo. No podemos dedicar nuestro dinero a mantener empresas no rentables que no aporten nada a la sociedad, ni en cubrir las pérdidas de los bancos o las constructoras. Nuestros impuestos, aparte de ir a justicia, educación ( ¿ he dicho educación ? EDUCACIÓN ), sanidad, seguridad y obras públicas, tienen que servir para conseguir que este país de el paso adelante que necesita. Hay gente preparada que tiene que irse fuera, hay empresas con la capacidad para investigar. Pero la investigación inicialmente es costosa, y suele poder mantenerse solo con subvenciones y créditos blandos hasta que se encuentra algo rentable. Pero siempre será mejor "perder" dinero en algunos proyectos que gastarlo en formar investigadores que tengan que irse a otro país y que generen beneficios y paguen impuestos en él.

España necesita I+D+i, y no puede hacerse con un recorte del 18% partiendo de un nivel de gasto tan misérrimo como el que había.

martes, 6 de octubre de 2009

Veinte horas que pasarán veloces

Parece que guardo silencio este fin de semana, pero no es así, estoy
escribiendo frases más importantes que las que hay en este blog. Aquí
es fácil enlazar unas con otras. Hay otras que son más complejas...

Como en unas horas vuelvo a subirme a un avión, y esta vez no
garantizo que haya wifi, a lo mejor no me queda sino guardar silencio
durante una semana. Bueno, miento, porque hay un artículo ya
programado para que se publique el miércoles. Pero vamos, del viaje,
ya veremos a ver si podemos contar algo. Aunque sea para que lo
recuerde yo dentro de unos años...

En mi ausencia sean felices, que no será poco.

Besos para todos. Sobre todo, como no, para ti...

viernes, 2 de octubre de 2009

El tortazo esperable y esperado

Cuando los astrólogos vieron su futuro, siempre supieron que Gallardón
iba a ser presidente de la Comunidad de Madrid y alcalde de la capital
de España. Lo que también estaba grabado a fuego era que nunca iba a
organizar unos juegos olímpicos en esta ciudad.

Los juegos olímpicos se asignan a las ciudades por lo que siempre se
sospecha: razones absurdas o sobornos. Los informes y méritos
adquiridos son papeles para llenar páginas de periódicos y disimular
la historia real que sucede en lugares sin cámaras.

Mañana se dirá que el cambio de continente, regla nunca escrita, fue
decisivo. ¿ Tiene sentido esa regla ? ¿ Se puede pedir, reclamar que
cambien de continente de una edición a la siguiente ? Lo veo absurdo:
Londres ya lleva tres juegos olímpicos, EEUU, como país, cuatro. Esto
sin contar los de invierno. La regla del cambio de continente ha
hecho, casi con total seguridad, que ni los alemanes ni los franceses
nos hayan votado ahora ¿ Cómo iban a atreverse queriendo organizar
ellos los siguientes ?

Con cualquier otra ciudad hubiéramos ganado la final: muchos de los
votos de Río hubieran venido con nosotros. Pero nos hemos quedado los
dos países latinos frente a frente. El gigante emergente contra el que
fuere imperio. Victoria por KO.

Solo espero que esto sirva para algo en Río, ciudad llena de miseria y
delincuencia. Esperemos lo aprovechen.

No pienso felicitar a los brasileños, me temo. Esto no ha sido una
competición justa. 2016, salvo milagro, los juegos con menos turismo
de la historia... Ojalá nos venguemos en el mundial de fútbol de
ellos!