La decisión: las fechas y los billetes ya comprados de nuestro viaje a Alemania. Montar un viaje para 16 personas es una hazaña, pero parece que lo hemos conseguido. De hecho, al final parece que acabaremos moviéndonos 18, porque vamos a intentar que aquellos a los que vamos a ver, nuestra pareja de farmacéuticos favorita, también se desplacen. Y todo esto cuando solo uno de los 16 sabe alemán. Recordemos llevar apuntado el número de la embajada, por si acaso.
La disculpa: para los que vinieron a mi casa a concretar los detalles del viaje y descubrieron, a la vez que yo, que el aire acondicionado del salón hace saltar los fusibles y que la mejor solución fue hacinarnos en mi cuarto con mi ventilador. Y a pesar de eso logramos tomar decisiones.
El fracaso: el de cada año. No poder acabar los 100 kms en 24 horas. En el km 35 me di cuenta de que mis gemelos (¡que error el del miércoles!) ya estaban demasiado cargados para afrontar los tramos de después de los 50 kms. Así que decidí abandonar ahí, que para llegar al 50 y abandonar, mejor cuanto antes. Hay mejores cosas en la vida en las que luchar, aunque espero algún año conseguir acabarlos.
Las alegrías: el Real Madrid de fútbol y el de baloncesto, que hicieron lo que tenían que hacer, mantener intactas sus posibilidades de ganar la liga.
Edito: como bien me puntualizan, basket y baloncesto suelen ser el mismo deporte, así que edito y corrijo. Debo haber confundido el deporte después de ver a Messi marcando con la mano.
1 comentario:
El madrid de basket, el Madrid del baloncesto, y se te ha olvidado el Madrid de basketball :-D
Lo que te perdiste muchacho, 4 pizzas familiares y unas consolas, gran plan juntado con los 2 goles de Rud y el Villarreal en UEFA a costa del Atleti, no sé si seré capaz de aguantar tanta felicidad!
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