miércoles, 26 de agosto de 2009

Lo que cambia una letra...

Venga, segundo dia que hablo de trabajo, esta vez en un ordenador que se niega a poner tildes. Hoy la explicacion de mis dolores de cabeza es sencilla: si algo vale cuatro y cambia de unidades, ya no vale cuatro, por mucho que se uno recuerde que ese era su valor antes. Si pasamos de segundos a milisegundos, cuatro pasa a ser cuatro mil, por obra y gracia de las conversiones de unidades.

Y esto, que parece tan trivial, cuando uno no es consciente, puede provocar amplios quebraderos de cabeza...

Al menos se arreglaba facil, aunque la hora perdida nos dejo sin tiempo para seguir con lo que podiamos haber adelantado de manyana... Una lastima, puede ser un jueves largo...

Voy a ver si ceno algo por aqui, por aquello de que he comido un misero bocadillo...

Hala, sean felices alla donde anden o corran o moren.

No hay comentarios: