Alguien propuso, posiblemente a mala idea, que Postdam lo recorrieramos en bici. Formar una serpiente de 16 bicis que recorriera el Aranjuez berlines.
Y dicho y hecho, eso hicimos. Y el que lo dude, aparte de las fotos, puede hablar con mi dolorida rodilla derecha, que sufrio de lo lindo. Lo que tiene llevar bastante mas de una decada sin subirse uno a un cacharro de esos.
El caso es que me lo pase bien, pardiez. La bici nos permitio recorrernos Postdam sin problemas de un lado a otro sin dejar nada en el tintero. Ademas, hizo un tiempo genial, que nos hizo sudar un poco incluso. Una original excursion campestre, coronada con comida tipo picnic.
Ya centrandonos un poquito en Postdam, hay que decir que es un pueblo de visita casi obligatoria. Jardines gigantescos con sus zonas espectaculares, sus grandes fuentes, sus largas escaleras... Palacios y castillos por todas partes, edificios que han marcado la historia (si, en Postdam fue la conferencia de Postdam, lo que es la vida).
Lo unico malo de la visita, quitando la caida de la mujer cuyo color no es precisamente el blanco y que no se hizo nada por estar protegida por Vishnu, fue ir al WC. Esta vez si que nos toco pagar. Hubo que soltar los 50 cts por entrar en un WC no excesivamente limpio, que seguia oliendo a orin y que no aportaba nada con respecto a otros WCs vistos en otros sitios.
La jugada de tener a alguien contratado como perro de presa para saquear el WC implica dos cosas: que los visitantes estan en tension cuando van, porque suele estar agazapada para que te confies y poderte saltar al cuello cuando menos te lo esperas y la segunda, que como el responsable del WC solo se encarga de cobrar, no debe limpiar nunca. Un sistema cojonudo que lo unico que indica es que aqui la mano de obra no puede ser muy cara salvo que todo el mundo se este dejando el sueldo en ir continuamente al retrete.
Por hoy nada mas, seguiremos informando en proximas entregas. En principio, hoy tocaba Zoo, pero esta chispeando. Veamos que decide la turba cuando se despierte...
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